El que con lobos anda a aullar se enseña.

Con esta postal iniciamos una serie de mensajes creativos que hemos titulado “Hagamos el cambio” y que son un llamado que busca concientizar acerca de obedecer la palabra de Dios, pero es que si apenas escuchamos Biblia todo suena a religión y como que muchos están ya vacunados, quizás justamente, gracias a aquellos que predican una cosa y hacen otra, otros que roban en despoblado y a los que predican doctrinas bien extrañas, pero bueno no entraremos a esos terrenos porque poco edifican, el objetivo está en hacer el llamado a hacer un cambio en nuestra manera de vivir y para no espantarnos desde el inicio lo haremos de una manera muy simple; a través de refranes mexicanos que sin duda son reflejo de una sabiduría popular acumulada con el tiempo y que los hay para toda situación y que además de formar parte del folclore verbal de nuestro país, reflejan experiencias, recelos, malicias y hasta humor negro, pero siempre con un espíritu de enseñanza viva, voces que describen el carácter del mexicano, nuestras preocupaciones, aficiones, culpas, prejuicios, motivaciones, traumas, etc.

Los refranes los remataremos con una cita bíblica para dejar las cosas en claro para quienes creemos en Dios a sabiendas que la palabra de Dios no vuelve a Él vacía sin haber realizado lo que Dios desea, logrando el propósito para el cual fue enviada y que toda la escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, corregir y educar en una vida de rectitud. Esperamos que con esta serie de mensajes logremos comunicar a través de la simpleza del lenguaje popular y la claridad y contundencia de la palabra de Dios que muchas veces tratamos de acomodar a gusto, pero bueno ya estando en estos terrenos porque no iniciar esta primer postal con un dicho: “a darle que es mole de olla”, iniciemos con este primer mensaje.

“El que con lobos anda a aullar se enseña”

Este refran es bien popular, quizás por su simpleza, pues hay algunos refranes que esconden la sabiduría en lo literario, pero no este, este refrán advierte que cualquier costumbre que tengan las personas con las que acostumbramos a estar, podemos acabar por adoptarla. También podemos utilizarlo para las malas compañías “enseñarse” significa habituarse o acostumbrarse y lo más seguro es que quienes conocen la palabra de Dios ya empezaron a maquinar varias citas bíblicas que van muy bien para dejar las cosas en claro con la palabra de Dios acerca de este tema, pero para esta postal ya elegimos cita y nos centraremos en:

1ª de Corintios 15:33-34 en la versión de lenguaje actual (TLA)  ¡No se dejen engañar! Bien dice el dicho, que «Las malas amistades echan a perder las buenas costumbres.» Piensen bien lo que hacen, y no sigan desobedeciendo a Dios. Algunos de ustedes deberían sentir vergüenza de no conocerlo.

¿Qué tal? Aquí el Apóstol Pablo hasta refiere a un refran “las malas amistades echan a perder las buenas costumbres.” Haciendo referencia posiblemente a Menandro, escritor ateniense del siglo III a.C. para mostrar que nuestras vidas se ven influenciadas por las personas con las que nos asociamos y si estos muestran conductas que evidentemente van contrarias a los valores basados en la palabra de Dios corremos el riesgo de que nuestras buenas costumbres y/o valores basados en la palabra de Dios se afecten. Si bien no podemos salir de este mundo y dejar de tener contacto con personas que no conocen la palabra de Dios, antes bien, debemos influenciarlos nosotros, si debemos tener cuidado de no dejarnos influenciar y que nuestra buena conducta y valores basados en la palabra de Dios se echen a perder por las malas amistades y no solo de quienes no conocen la palabra de Dios, también tengamos cuidado de los mismos creyentes de los que nos habla Pablo en esta misma carta 1 Corintios 5:11 así que creyentes o no tengamos cuidado con quienes mantenemos una frecuente relación y como lo dice el dicho "El que con lobos anda a aullar se enseña". Recordemos que la naturaleza humana es pecadora por naturaleza que muchos malos hábitos y placeres del mundo son fáciles de adquirir, así que tengamos cuidado porque cuando menos cuenta nos demos pronto estaremos aullando si con lobos nos juntamos, y si hay alguna duda de ello, veamos las disertaciones de alto nivel del mismo Apóstol Pablo en Romanos 7.