En el 2016 en nuestra iglesia Semilla de Mostaza tuvimos el gusto de coincidir y poder platicar a fondo con nuestra hermana en Cristo Esperanza y damos gracias a Dios por su vida, ella tienen a su cargo el ministerio de “Esperanza a los Rarámuri”, pudimos ver todo el trabajo que realiza nuestra hermana en la sierra Tarahumara y el trabajo que también nuestra iglesia ha realizado en esta misión, Dios nos dio la oportunidad de trabajar junto con ellas para glorificar el nombre de Dios para que en la comunidad de Charerachi en la sierra Tarahumara conozcan más del amor de Dios y sea un pueblo que alabe a Dios.

“Para que sea conocido en la tierra tu camino, en todas las naciones tu salvación. Te alaben los pueblos, oh, Dios; todos los pueblos te alaben”. (Salmos 67:2-3).

Y en cuanto al tema de amor al prójimo, sin duda hay mucha tela de donde cortar, empezamos por enviarles uniformes para el ciclo escolar 2016 de primaria, en el caso de las niñas enviamos tela para que ellas hicieran sus propios uniformes, lo cual nos emociona mucho, muy pronto pudimos ver los uniformes hechos a mano con los colores de Enviando Vida, las niñas se ven hermosas y para los niños enviamos pantalones de mezclilla y camisas, la verdad es que no cabe duda que Dios interviene hasta en eso, pues en las tallas siempre hay variaciones, pero tal parece que todo estaba hecho a la medida, pues les quedaron como mandados a hacer.

Oramos para que junto con la hermana Esperanza aprendan mucho en su escuela que construyeron ellos mismos con la ayuda de la iglesia “Semilla de Mostaza” quien colaboró en dicha construcción, damos gracias a Dios al ver como si se puede trabajar como un cuerpo en Cristo, no lo dice un viejo y conocido refrán, lo dice el Apóstol Pablo en Romanos 12: “Digo, pues, por la gracia que me es dada, a cada cual que está entre vosotros, que no tenga más alto concepto de sí que el que debe tener, sino que piense de sí con cordura, conforme a la medida de fe que Dios repartió a cada uno. Porque de la manera que en un cuerpo tenemos muchos miembros, pero no todos los miembros tienen la misma función, así nosotros, siendo muchos, somos un cuerpo en Cristo, y todos miembros los unos de los otros”.

Pusimos en manos de Dios esta comunidad y te invitamos a que te subas al barco orando por ellos para que Dios les de protección pues se ha desatado la violencia, confiamos en Dios, los ponemos en su mano y agradecemos por tus oraciones.

Orando por las necesidades del ministerio de nuestra hermana Esperanza en la Sierra Tarahumara, por las maestras, para que Dios las fortalezca y puedan seguir compartiendo la palabra de Dios a todas esas familias y sigan instruyendo a los niños en su educación, Dios puso en nuestro corazón el hacer llegar un mensaje de luz y alegría a los niños Rarámuri.

Mientras platicábamos con nuestra amiga Laura (colaboradora de Esperanza a los Rarámuri) viendo fotos y videos de los niños, Dios puso en nuestro corazón hacerles llegar un mensaje a los pequeños, decirles que Dios los ama y quiere verlos sonreír y asegurarles que al poner su confianza en Dios su camino siempre será alumbrado con su luz y sus vidas resplandecerán aun en la oscuridad.

Nos dimos a la tarea a través de nuestra agencia de publicidad Comunicación de Altura, S.A. de C.V. de crear una estrategia que lograra comunicar el mensaje a los niños de forma sencilla y contundente, lanzamos una pequeña campaña “Dios es luz y sonrisas”. La campaña consistía en hacerles llegar a los niños una cajita con pulseras luminosas, que vaya que brillarían en la oscuridad en la sierra Tarahumara, también pusimos dulces muy peculiares en la cajita ya que estos al ponerlos en la boca truenan, buscábamos arrancarles una sonrisa. Las cajitas las hicimos llegar a Charerachi por mensajería, donde nuestra hermana Esperanza las recogió para hacerlas llegar a la sierra.

Sabemos que en todo este proceso Dios nos proveyó de ideas y de los materiales necesarios para hacer llegar el mensaje a los niños Rarámuri de que Dios es Luz y Alegría, y a juzgar por las fotos creo que cumplimos con el objetivo. En Enviando Vida agradecemos infinito al ministerio Esperanza a los Rarámuri el permitirnos trabajar juntos y glorificar el nombre de Dios.

Para que sea conocido en la tierra tu camino, en todas las naciones tu salvación. Te alaben los pueblos, oh Dios; Todos los pueblos te alaben. (Salmos 67: 2-3)

Nuestras hermanas Esperanza y Georgina de “Esperanza a los Rarámuri” visitaron las oficinas de Enviando Vida para tratar diversos temas en los que Dios nos ha dado la oportunidad de trabajar juntos como hermanos en Cristo y compañeros de iglesia en Semilla de Mostaza para servir a nuestros hermanos Tarahumaras y honrar a Dios, no dejamos pasar a la ligera la visita de nuestras hermanas  y sin planes de entrevista aprovechamos para entrevistar a nuestra hermana Esperanza, para conocer su punto de vista acerca del trabajo de campo de un cristiano que vaya que si lo conoce nuestra hermana Esperanza.

Fue de gran bendición platicar con ella y escuchar como disfruta su ministerio “Esperanza a los Rarámuri” en la sierra Tarahumara, nos deja ejemplo de cómo vivir un cristianismo activo y lejos de motivar a todos a un trabajo de evangelización, pero si a activar esos dones que Dios nos ha dado y no llevar un cristianismo monótono donde solo escuchamos de Dios y no damos el siguiente paso para conocer más acerca de lo que Dios quiere de nosotros, sacándonos de nuestra zona de confort y

darnos cuenta que el evangelio no solo son cosas vanas y comodidades, que no solo nos acerquemos a Dios cuando necesitamos algo o cuando estamos en problemas, que el evangelio también es arremangarse, trabajar, aportar, sumar, que el evangelio es de valientes y hay que estar dispuestos a trabajar, que no solo es gritar amen los domingos y mover emociones a través de gritos y declaraciones enfocadas al “humanismo” y al “Yo merezco” y ser conscientes a través de los hechos que lo que Dios ya nos dio tanto espiritual como material lo podemos compartir dando de gracia lo que de gracia recibimos, que nuestra mirada de vez en cuando, debe estar por lo menos dos dedos arriba de nuestras frentes y no solo de lo que en nuestras narices.

No les platicamos más solo anticipamos que después de escuchar esta platica de Enviando Vida con nuestra hermana en Cristo, si eres honesto contigo mismo seguramente veras las cosas de diferente manera.

En 2018 dimos un paso más con los Raramuri y de tener el gusto de conocer a nuestra hermana Esperanza en nuestra iglesia Semilla de Mostaza y gracias a Dios continuamos trabajando en conjunto con nuestra hermana y su ministerio “Esperanza a los Rarámuri”, por el cual oramos para que Dios los guarde y siga bendiciendo en la sierra tarahumara.

Dentro de nuestras posibilidades Enviando Vida sigue comprometido apoyando dicho ministerio enviando sus uniformes escolares a los pequeñitos de escuela primaria que atiende nuestra hermana Esperanza, solo que ahora hemos dado un paso más y además de enviar los uniformes estamos apoyando dicho ministerio generando fuentes de empleo a través del comercio de pulseras con el mensaje de “Dios te bendiga” en lengua tarahumara “Riosi mi kuirsa” que ellos mismos tejen y nos envían para comercializarlas.

Esperamos que pronto la comercialización de las pulseras tenga un crecimiento para de esta manera también ser una fuente de bendición para nuestros hermanos que están en la sierra y que a través de ese talento que ellos tienen en el tejido puedan recibir ingresos.

Damos las gracias a todos aquellos que han comprado algún producto de Enviando Vida pues con la venta de nuestros materiales es que podemos apoyar causas como la de “Esperanza a los Rarámuri” entre muchas otras más acciones de las cuales podrás enterarte en esta misma página y si aún no has comprado nuestros productos te invitamos a que lo hagas a través de esta página o en librerías cristianas y te sumes a este movimiento, o bien súmate a Enviando Vida compartiendo el material que publicamos en www.facebook.com/enviandovida ya que nos ayudaras a compartir la palabra de Dios o bien regístrate aquí y recibe nuestras promociones, recomendaciones, invitaciones a eventos exclusivos y mucho más. “Riosi mi kuirsa” (Dios te bendiga) y no olvides adquirir tu pulsera y aportar tu granito de arena para la sierra Tarahumara.

Un paso más para que la palabra de Dios llegue a todos los pueblos, esta vez de la mano con Sociedad Bíblica de México A.C.

En una plática de trabajo con el Arq. Julio Splinker Director de Sociedad Bíblica de México, A.C. pusimos sobre la mesa el trabajo que realizamos con el ministerio de Esperanza a los Rarámuri, y de inmediato el Arq. Julio Splinker nos canalizo con el área de proyectos en traducciones de la Sociedad Bíblica de México que busca dar a conocer la Palabra de Dios a pueblos indígenas en su lengua natal, a cargo de Iskra Galicia para que otorgara a Enviando Vida los Evangelios de Lucas, en lengua Rarámuri, siendo de mucha bendición para la comunidad de Charerachi, en el estado de Chihuahua, ya que los niños ahora podrán leer en su lengua natal el Evangelio de nuestro Señor Jesucristo.

Con esta entrega de Sociedad Bíblica de México en el 2019 además de hacer la entrega de uniformes y pasamontañas con pechera para que los niños se cubrieran del frio, también pudimos entregar el evangelio de San Lukasi a los niños Rarámuri.

Al llegar la hermana Esperanza a la Comunidad de Charerachi en el estado de Chihuahua, nos expresa que a los niños les dio mucho gusto poder leer en su propia lengua (Rarámuri) un libro, pero no cualquier libro, el Evangelio de San Lukasi, Esperanza nos refiere que ellos se sintieron muy bien al poder tener en sus manos este material y agradecidos con Sociedad Bíblica de México por todo el trabajo que realizan en las traducciones e impresiones de estos materiales y del obsequio que realizaron, logrando así nuevamente trabajar como un cuerpo en Cristo, Sociedad Bíblica de México, Enviando Vida y Esperanza a los Rarámuri. Que privilegio tan grande para nosotros ser parte de este proyecto de hacer llegar el evangelio de Cristo en lengua Rarámuri a la sierra Tarahumara

Enviando vida se vistió de manteles largos una vez más al tener como invitada a nuestra Hermana Esperanza, del Ministerio Esperanza a los Rarámuri y nuestra hermana en Cristo en la Iglesia Semilla de Mostaza.

Fue una experiencia muy enriquecedora contar con su presencia, toda vez que en su plática nos llevó hasta Charerachi, en la Sierra Tarahumara, en el estado de Chihuahua, conociendo un poco de su historia de todo lo que paso para llegar a convivir con los Rarámuri y predicarles el evangelio, historias de una guerrera, que dejo todo para ir a servir a esta comunidad, siendo de profesión una gran dentista, se fue a conocer más a los Rarámuri, pasando por un sinfín de situaciones, pero creyéndole a Dios, porque gracias a Él, hoy está sirviendo en este ministerio a tantos niños, enseñándoles la Palabra de Dios, a pesar de que ellos en su lengua natal no existe la palabra amor, hoy Esperanza les está llevando el mensaje de amor de Dios, y predicándolo con el ejemplo, les muestra cada día que gracias a Dios pueden ver el sol, tienen un lugar donde estudiar, donde dormir, tienen alimento y una  gran sonrisa, a pesar de las dificultades por las que atraviesa la zona donde se encuentra la escuela que fue construida con la finalidad de que los niños estudiaran, pero confiamos en Dios y en su gran amor. Pedimos de sus oraciones para nuestros hermanos Rarámuris y para nuestra hermana Esperanza, que Dios los guarde y los fortalezca en la Sierra Tarahumara.

Gracias al trabajo que realizamos con Esperanza a los Rarámuri también tuvimos el gusto en Enviando Vida de conocer a la familia Ramírez, una familia de corredores de fondo y ultra fondo conocida a nivel mundial ya que Lorena Ramírez logro ganar en 2017 la Ultra Trail Cerro Rojo y por haberlo hecho además con huaraches.

Su hermano Mario Ramírez quien también ha participado en carreras de ultra maratón en Tenerife España, Canadá y Japón visito las instalaciones de Enviando Vida y tuvimos la oportunidad de convivir con él un par de días donde pudimos platicar muchos detalles interesantes de la vida y de nuestra relación con Dios ya que cabe mencionar que la familia también conoce de Dios.. Entre documentales, tamalitos, café, visitas al nido águila pues quería conocer la casa de tan importante equipo. También pudimos pasar unos días dejándonos seducir por una vida mucho más tranquila, sin tanto ajetreo pues Mario siempre nos instaba a la tranquilidad, fue interesante su punto de vista acerca de la cercanía que se puede tener con Dios en la sierra, donde el paisaje rápidamente te remonta a la grandeza de Dios y a lo pequeño que es el ser humano ubicándote en el lugar correcto, en su bondad, su amor y sustento.

Damos gracias a Dios por todo el trabajo que hemos podido realizar y también agradecemos a todas las personas que de alguna forma participan en las entregas que realizamos haciendo donativos en dinero y en especie. Si quieres formar parte y realizar algún tipo de donativo te invitamos a ponerte en contacto con nosotros escribiéndonos a contacto@enviandovida.com.mx